Corremos la figura de José Artigas a la periferia, re-afirmando así un discurso decimonónico ya sin demasiados fundamentos.
La Liga de los Pueblos Libres fue un proyecto que le puso coto a la voracidad de Buenos Aires; un puerto-vértice, con ubicación privilegiada en el gran embudo natural que es la Cuenca del Plata, que filtraba y extraía riquezas, materias primas, destinadas al mercado internacional en el contexto de la división internacional del trabajo del siglo XIX.
El Proyecto Mestizo y el Proyecto Burgués
El proyecto burgués (pro-británico) de Rivadavia y los retazos de la Iglesia católica colonial, lograron sintetizar el poder territorial más antiguo (conectado con Potosí) y el flujo económico más dinámico, el puerto, e instalaron la posibilidad (ficticia) de que la zona más conservadora vuelva a ser el centro (Tucumán). La operación política duró poco; pero se consiguió arrancar a Córdoba de las garras del Proyecto Mestizo. Luego el poder se trasladó (volvió) rápidamente a los comerciantes y banqueros del puerto.
En Tucumán, Belgrano, San Martín y Güemes, enfrentaron a los abogados y los curas, perdieron la discusión por el Incanato siendo minoría; discutiendo con 29 congresales que sabían muy bien cuándo levantar la mano.
La Cuenca del Plata es la parte de América del Sur drenada por el río de la Plata y sus afluentes. La gran cuenca tiene un área aproximada de 3.150.000 km².
Imagen. De Kmusser - Trabajo propio, Elevation data from SRTM, drainage basin from GTOPO [1], all other features from Vector Map., CC BY-SA 3.0, Enlace
Dos importantes puertos de la Banda Oriental, Montevideo y Colonia del Sacramento, fueron entregados por la burguesía de Buenos Aires al Imperio portugués-brasilero. Luego con los mismos esclavistas y el imperio británico derrocarían a Rosas y al Mariscal Solano López. El poder del dinero y la Banca es fundamental; la carne de cañón fueron los gauchos (la barbarie).
La pelea por los Puertos la daban aquellos territorios incluidos en el gran embudo de la Cuenca del Plata; la Liga de los Pueblos Libres era un proyecto mestizo con puertos propios (rutas propias) que protegía un mercado regional pluricultural.
Córdoba no tenía puertos en la gran cuenca; pudo acoplarse por un tiempo al sueño rivadaviano; aún conserva su espíritu federal y mestizo - recuerdo en este instante a la CGT de los Argentinos.
El proyecto mestizo venía creciendo desde el pie: en la asamblea del año XIII con las instrucciones de Artigas, en las Misiones Jesuíticas, en las diatribas de Juana Azurduy y Andresito Guacurarí; en cada pulpería de los márgenes donde latía el pulso popular.
Entre Ríos no participó del Congreso de Tucumán porque junto a sus aliados Federales quería distribuir equitativamente los ingresos de la Aduana de Buenos Aires, o abrir los puertos internos con un férreo control de la Confederación; y eso no se discutía en este Congreso.
M. Faure
Bibliografía
Mujeres de Fuego, Stella Calloni.
Las venas abiertas de América Latina, Eduardo Galeano.
Mensaje Ambiental a los Pueblos y Gobiernos del Mundo; J. D. Perón.
Historia de la Nación Latinoamericana; Jorge A. Ramos.
Las ecuaciones del coloniaje; Jorge Rulli.
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